En las recientes décadas la orientación profesional se ha abocado a una o dos tareas principales: el diagnóstico y/o la información profesional, actividades que no han sido ni serán suficientes ni efectivas para cubrir las necesidades de los estudiantes en lo académico y lo profesional. Ante esta realidad cobra importancia integrar la orientación profesional dentro de la currícula como parte de un proceso formativo a lo largo de la vida académica del estudiantado. En esta obra sus autores presentan un estudio cuyos resultados permitieron identificar la influencia de factores personales y sociales sobre la certeza vocacional en estudiantes universitarios, para posteriormente contrastar los resultados de dicho análisis con los obtenidos a partir de la revisión de los contenidos programáticos impartidos en la materia de orientación educativa; específicamente los relacionados con el área vocacional. Lo anterior con la finalidad de identificar si el servicio de orientación que se les brindó a los estudiantes universitarios durante su formación en el bachillerato se sustenta en investigaciones que indiquen las principales áreas a ser atendidas. En este sentido, se sugiere el rediseño de programas de orientación educativa para los estudiantes de bachillerato, a través de los cuales se desarrollen intervenciones en los ámbitos socio-laboral, académico y personal con el propósito de facilitar sus elecciones académicas y profesionales.